En la época actual, sigue creciendo la influencia que la Unión Europea ejerce sobre las organizaciones internacionales y en el benificio de sus políticas comunes aplica instrumentos jurídicos particulares. Las obligaciones que representan estos instrumentos jurídicos bajo la forma de los convenios internacionales limitan las competencias de los Estados miembros de la eurozona en la esfera fiscal lo que facilita la centralización y conduce hacia la profundización de la integración.

El futuro del EURO y el mantenimiento de la estabilidad financiera depende de los Estados miembros mismos tanto como de su responsabilidad legal en la escala internacional de cumplir sus compromisos de buena fe. Aunque las políticas económicas de los Estados miembros han de ser el asunto del interés común, aparecen entre los Estados miembros opiniones diferentes sobre la futura orientación de la política menetaria común.